Primeros pasos
Tras varios años de aprendizaje del oficio y de las artes de fabricación de conservas de pescado, Don Francisco Fontecilla y su hermano Gregorio decidieron salir a navegar durante un tiempo para hacer apropio de los fondos necesarios e iniciar, en 1963, una modesta andadura empresarial: una pequeña fábrica en la Villa de Santoña dedicada a la fabricación de conservas de pescado.
Hoy, Conservas Fontecilla, se ha especializado en la fabricación de Filetes de Anchoa y Conservas del Mar. Nuestros productos se elaboran con la maestría y el talento aprendidos de nuestros fundadores y con la incomparable destreza y experiencia de los pobladores de la Villa de Santoña que, transmitida de generación en generación, garantiza el inigualable sabor, textura y acabado de nuestras anchoas.